Este verano del 2007 subimos de excursion a los lagos Romedos. Mi mujer y yo pudimos disfrutar de un paisaje mágico, aislado, precioso, lleno del misterio y la soledad de los lagos de alta montaña. Impresionante el silencio del que pudimos disfrutar,
interrumpido solamente por el silbido de la cola de rata atravesando el aire y el frenético chapotear de los salvelinos incautos engañados por mis moscas.
interrumpido solamente por el silbido de la cola de rata atravesando el aire y el frenético chapotear de los salvelinos incautos engañados por mis moscas.
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| romedos 2007 |
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